Ph. Zerg Castiblanco |
Me devolví a casa porque había olvidado algo, cuando puse la llave en la puerta alguien me dijo: ¡Daisy! Y en el momento que di la vuelta no había nadie, solo un perro mirándome, entonces me dijo: hola, ¿me podrías dar algo de comer?. No me sorprendió que supiera mi nombre, tampoco que hablara, me sorprendió la voz caricaturezca que tenía, es como si todo lo dijera con la gesticulación de la letra "o" además su hocico amarillo a penas lo abría. Así que le dije: ¡claro! Jamás le negaría comida a un perro y menos si me habla. Entré a mi casa y lo primero que ví sobre la mesa fue un pan muy grande; al momento que se lo entregue le pregunté, ¿Crees que es suficiente? Así que me respondió: más que suficiente, gracias Daisy.
Al otro día en la ciclovía matinal de domingo conté cinco Rottweilers, a todos los observé y nos encontramos miradas cómplices de haber alimentado a su raza.
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ResponderEliminarTuve que volver a la parte donde el Rottweiler dijo "¿tienes algo de comer? para repetir la frase con la "o" 😂
ResponderEliminar♥️
EliminarQuiero pan.
ResponderEliminarPan, pan, pan! 😅
EliminarQue sueño tan tierno, ya no solo te echan los perros en un estado de trascendencia tambien te piden pan 🤣
ResponderEliminar😁😁😁
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